Educación Física y Ciencia, 2004/2005, vol. 7, p. 97-107. ISSN 2314-2561
Universidad Nacional de La Plata.
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación.
Departamento de Educación Física.

Artículo/Article

Emergencia de culturas juveniles. Estrategias del desencanto

Gabriel Armando Cachorro


Introducción

La investigación en el campo de la Educación Física ofrece diversos objetos de estudio que responden a diversas líneas de indagación. Existen exploraciones de corte cualitativas, cuantitativas, socioculturales, biológicas, semióticas, e incluso mixtas. Esta situación de enfoques múltiples sobre temas de la profesión, demanda insumos teóricos, metodoló-gicos, técnicos para materializar los productos de investigación en tesis utilizando prácticas y saberes de diferentes disciplinas del conocimiento. Este procedimiento en la construcción demuestra el carácter multidisciplinario de la Educación Física que nutre sus problemas de investigación, diagramando cruces entre materiales compartidos con otras disciplinas.

Esta diversidad de perspectivas de investigación que operan en la Educación Física, tienen un punto en común. Todas las investigaciones en el campo de la Educación Física demandan un trabajo teórico metodológico que estructure la tesis colocando sus elementos (objetivos, hipótesis, triangulaciones, etc.) en una composición artesanal original que elabora su mentor.

En este sentido creemos que la construcción de un trabajo de investigación en el ámbito de la Educación Física, le demanda al tesista, la familiarización con tesis concretas y el análisis de sus elementos estructuradores. Este tipo de trabajos constituye un ejercicio metodológico de identificación de trabajos que posibilita ver distintos formatos de tesis y colabora en la proyección de la propia propuesta de edificación de la obra de tesis.

A partir de esta idea, se toma el libro de Rosana Reguillo para mostrar un ejemplo de análisis metodológico de tesis. Se escogió este libro porque aborda un tema emergente en el campo de la Educación Física: los jóvenes, sus formas de asumir sus identidades, donde el cuerpo es un sitio clave en la resolución de ese pleito existencial.

En este trabajo se realizó un análisis metodológico del libro de Rossana Reguillo "Emergencia de culturas juveniles. Estrategias del desencanto". Su primera edición es del año 2000, por el Grupo Editorial Norma.

a. El modo de hacer ciencia de esta investigación

El texto seleccionado se inscribe en un modelo crítico de investigación, en diversos pasajes del libro aparecen posicionamientos de la autora sugiriendo atender lo instituyente, apelar a enfoques socioculturales. Nos exhorta a separarnos de investigaciones descriptivas y sugiere estrategias de intervención dotadas de comprensión de los nativos. Se declara a favor de las perspectivas interpretativas hermenéuticas.

La investigación es de corte cualitativo y reacciona con críticas hacia los abordajes realizados sobre la cultura juvenil que apelan a clasificaciones estandarizadas provistas por discursos biologistas prescindiendo de los contextos particulares de realización. En virtud de estos cuestionamientos a los estudios realizados sobre los jóvenes, la escritora formula los objetivos de esta propuesta que apuntan a la captación de sentidos sociales atribuidos por los sujetos juveniles al desplegar sus acciones. Enfatiza la importancia de estudiar las prácticas sociales y el reconocimiento de los sujetos juveniles que en definitiva es reconocer la subjetividad.

Sugiere una problematización de los jóvenes contemplándolos en su complejidad. Establece algunos desplazamientos en las formas de ejercer la mirada de investigador sobre los jóvenes como objetos de estudio. Reguillo subraya la necesidad de hacer un giro de la definición y calificación hacia el entendimiento, un desplazamiento de la lectura esteticista a las miradas alternativas de las culturas juveniles expresadas en diversas formas de organización y adscripción identitaria. Una ruptura de los esencialismos o las divisiones de clases para instalarnos en los imaginarios colectivos juveniles. (Páginas 16, 26, 27, 32, 33, 34, 35, 37, 41, contratapa).

b. Los objetivos de la investigación

La autora declara en forma explícita en algunos pasajes del libro que sus objetivos apuntan a analizar desde una perspectiva sociocultural las prácticas juveniles y comprender los modos que se cristalizan las representaciones, valores, estilos. Este objetivo se articula con otro de corte político, que intenta romper con algunos abordajes "esteticistas" y "epidemiológicos" construidos en torno a los jóvenes. (Páginas 16, 47, 103).

c. Las preguntas o hipótesis centrales

En el libro subyace una pregunta rectora de la investigación referida a cómo resuelven los sujetos juveniles su inclusión ciudadana, en un mundo conflictivo? (Páginas 13, 15, 23). Esta pregunta es recurrente y se formula en el transcurso del documento una y otra vez de diversas maneras.

A su vez se detectan un segundo nivel de preguntas que operacionalizan esta pregunta central. A este nivel encontramos: los modos de autonombrarse utilizados por los jóvenes: góticos, taggers, punk, metaleros, etc. producen una ghetización de las identidades?, en una sociedad con deterioro estructural cuáles son las estrategias de autoempleo desarrolladas por los jóvenes?, qué nos están tratando de decir los jóvenes con sus prácticas en términos de configuraciones afectivas, cognitivas y políticas? (Pág. 152).

Las hipótesis, son congruentes con la pregunta, sosteniendo que el conjunto de prácticas juveniles desplegadas en sus múltiples formas: grafittis, ritmos tribales, alternativos, etc. son formas de actuación políticas poco entendidas. (Páginas 14, 30).

En la perspectiva de la autora, los jóvenes son actores sociales que no pueden encasillarse en esencialismos o divisiones de clases sociales estandarizadas. Es más conveniente referirnos a los jóvenes apelando a los imaginarios colectivos, las adscripciones identitarias, las culturas. Estos conceptos son compartidos por los sujetos juveniles a pesar de sus diferencias étnicas, políticas, regionales, etc. (Pág. 36).

Luego de haber desarrollado la investigación, la autora expresa la hipótesis en carácter de afirmación de que para la mayoría de los jóvenes la ciudadanía se define en la práctica, es una concepción activa que se define en el hacer. (Pág. 160).

La autora se vale de su larga trayectoria de investigación empírica con diversos casos juveniles para señalar que los jóvenes están inaugurando nuevas formas de participación política, nuevos lugares de enunciación y nuevos lugares de comunicación. (Pág. 149).

d. Los componentes del marco teórico o entorno conceptual

Rossana Reguillo expone un conjunto de componentes que están bajo el paraguas del concepto jóvenes, entendidos como sujetos del discurso. La autora inscribe su apuesta teórica en tres conceptos ordenadores: la agregación juvenil, las adscripciones identitarias y las culturas juveniles. (Páginas 36, 54). Estos tres conceptos centrales, alcanzan un nivel de concreción empírica, es decir como se concretan en las realidades estudiadas bajo diferentes niveles de compromiso social, al entablar la relación con los otros jóvenes: el grupo, el colectivo, el movimiento juvenil y la identidad juvenil.

La categoría central elegida por la autora -los jóvenes- se contempla en la intersección de dos dimensiones dinámicas que funcionan como conceptos indisociables: el contexto mundial y la situación local. El cruce de estas escalas microsociales y macrosociales constituyen un lente teórico para analizar el funcionamiento de algunos materiales internacionales que revisten el carácter de emblemas juveniles: la ecología, la música, el rock, la paz, la droga, la estética corporal. (Pág. 46).

El contexto de realización, es una categoría teórica que se centra en los siguientes ejes: los dispositivos sociales de socialización para el trabajo, las economías mundializadas, los consumos culturales, los discursos jurídicos, las tecnologías de la comunicación.

La situación local, es la categoría teórica complementaria de la anterior e involucra en su selección los siguientes elementos: las interacciones, las prácticas, el cuerpo y los rituales.

La biopolítica -entendido desde la perspectiva de Foucault como disciplinamiento de los sujetos para la utilidad en la sociedad- es un elemento importante en el esquema conceptual de Reguillo, porque en los cuerpos de los sujetos juveniles, se materializan o se encarnan procesos sociales y por este hecho constituye un sitio clave para elaborar interpretaciones. Los cuerpos son una clave importante porque tienen un nivel de concreción empírica tangible. El cuerpo como construcción social donde confluyen todos los sucesos de la vida cultural, necesita por su extensión inabarcable, recortes precisos que hagan foco en dimensiones concretas. La investigadora utiliza un abordaje sobre esa superficie de inscripción material, centralizando su mirada en la pobreza, el consumo, la moral y el género cristalizados en el cuerpo. (Pág. 75).

e. La estrategia metodológica de la investigación

En la estrategia metodológica se pueden identificar el empleo de: tareas, técnicas, instrumentos, recursos, fuentes de información, actividades, cronograma. La investigación incluye múltiples tareas organizadas a través de un planteo inteligente. La investigadora, accede al tema de las culturas juveniles describiendo el estado de la cuestión, se reportan los estudios existentes, los tratamientos y enfoques aplicados a los sujetos juveniles subrayando las zonas existentes en este tema sin investigar. La identificación de estos sectores sin tratamientos le permite construir su problema de investigación haciendo un anclaje en los agujeros o lagunas donde esta ausente una dimensión del conocimientos de las culturas juveniles. La reconstrucción del campo, la crítica a las investigaciones de corte descriptivo sobre jóvenes, le posibilita evidenciar la carencia de estudios críticos sobre los jóvenes, la consecuente relevancia social de la investigación, la justificación de su tema y la necesidad imperiosa de desarrollar una investigación que reporte una mirada menos prejuiciosa y naturalizadora de estos modos de ser y estar en el mundo configurados por los sujetos juveniles. Con este planteo estratégico queda abierta la posibilidad de formular otro tipo de problemas y preguntas de investigación orientados para su esclarecimiento con la construcción de variables novedosas a lo existente en el área de estudio.

La autora declara la utilización de un modelo múltiple. Allí conjuga diversas técnicas de investigación donde se incluyen las referidas a recolección de datos: la observación, el enfoque biográfico y el grupo de discusión. Estas técnicas se concretan a nivel de los instrumentos alternando las modalidades de observación participante, no participante, la entrevista en profundidad (en su versión individual y colectiva). Se puede visualizar técnicas de análisis de datos: el análisis estructural, se hace patente en varios pasajes del libro, hace análisis del discurso para entender las representaciones de los jóvenes y aplica una etnografía que presta atención a las interacciones de los sujetos juveniles. (Pág. 15). En esta línea, se confecciona un glosario donde se traducen los significados de expresiones juveniles. (Pág. 167).

En el texto la escritora declara que el material analizado demandó un trabajo de campo de tres años de duración, situación que nos permite inferir un cronograma de trabajo en el tiempo con sus respectivos plazos.

La investigadora efectuó una incursión en diversos casilleros de la vida social juvenil: las calles, las reuniones, las fiestas, los conciertos. Estos datos hablan las actividades desplegadas por la pesquisadora, en el trabajo de campo. A su vez, tuvo acceso a diversos documentos producidos por sus investigados que incluyen canciones, frases, poesías, diarios. La convergencia de todos estos elementos intentó ser trabajada para dar cuenta de las mutaciones identitarias de los jóvenes. (Pág. 102).

Los recursos humanos movilizados en esta investigación involucran a sus colaboradores y asistentes de un equipo de investigación. Los copensores de diversas áreas de las ciencias sociales que operan como interlocutores del proceso de indagación, en la tarea intelectual del informe final del trabajo. (Pág. 17).

f. La operacionalización de las variables centrales a la investigación

La categoría jóvenes se inscribe en una red conceptual. En ese tejido articulado de conceptos, se efectúa un análisis de corte etnográfico. Es aplicado a las configuraciones e interacciones que los grupos juveniles van asumiendo en su devenir de las prácticas sociales. En este marco podemos registrar como elementos derivados de este marco teórico variables que refieren a las modos de establecer tramas vinculares de los sujetos juveniles. Estas variables son formas diferenciadas de establecer lazos sociales, están discriminadas de la siguiente manera: el grupo, el colectivo, el movimiento juvenil y la identidad juvenil. La diferenciación no debe entenderse como parcelas inamovibles, sino que se debe contemplar en perpetuo flujo y movimiento, solo se establece como instancia provisoria en el vínculo de los jóvenes, las posibilidades de ubicación de los jóvenes en situaciones grupales son circunstanciales y coyunturales. A cada una de estas posibilidades de asumir la interacción con los otros, se le van formulando preguntas y se le construyen indicadores particularizados, con los cuales logran un alto grado de especificidad.

La variable grupo, está referida a un modo de estar juntos entablados por los sujetos que no necesariamente guarda relación con la pertenencia a una clase social o una zona geográfica. Los referentes empíricos utilizados por la autora que operacionalizan esta variable se localizan en el rock, el uso de la radio, la televisión, la política, la tecnología como sitios claves para rastrear los significados sociales puestos en juego inaugurando otros modos de nombrar la realidad. (Pág. 40). El grupo, como una variable que remite a un conjunto de sujetos que comparten coordenadas de espacio y tiempo, son operacionalizadas a través del concepto "territorio" un término inestable, dinámico que posibilita entender las incesantes reformulaciones de las prácticas juveniles expresadas en el barrio, la calle, las publicaciones subterráneas o los movimientos de protesta. Las reuniones grupales no son definitivas, cambian en un contexto de afecciones mundiales y de procesos de reterritorialización muy complejos.

En relación al colectivo, se señalan una multiplicidad de formas de expresiones juveniles organizativas. La investigadora identifica formas tradicionales donde el vínculo se entabla con organizaciones como partidos, sindicatos, iglesias, clubes deportivos y las diferencias de aquellas formas de organización autogestivas que asumen el carácter de "emergentes" a través de nuevas estrategias de autoempleo, nuevos proyectos de vida. En una bajada aún más próxima a la experiencia inmediata de los sujetos juveniles, se analizan como estos colectivos juveniles inauguran: los usos del cuerpo, el vestuario, la música, el graffiti, la tecnología, el acceso a objetos emblemáticos. (Páginas 28, 40). El colectivo, se operacionaliza en la construcción lingüística "marcas identitarias", esta expresión nos conduce a las maneras subjetivas de apropiarse y vivir las rastas, los tatuajes, grafittis, perforaciones, taggers y sus sentidos sociales atribuidos por la muestra de los informantes. (Página 61).

El movimiento juvenil, se concreta en los conflictos mundiales de la biopolítica, a su vez de este término se derivan debates de racismo, moral pública, estética, género. Estos temas alojan tensiones que tienen anclaje en la vida cotidiana de los jóvenes. Es un lugar de toma de decisiones cruciales. El racismo se operacionaliza en las prácticas corporales violentas de los skinheads ingleses y blusoinnor franceses o las políticas de exterminio de los favelados brasileños. La relación del cuerpo con la moral pública se desarrolla en las polémicas posiciones ante el aborto, el sida, la droga. Estos elementos a veces se condensan en el rock movilizando asociaciones con el pecado y el desenfreno sexual. La estética corporal globalizada, se operacionaliza en marcas identitarias supranacionales, visibles en consumos culturales internacionales: la música, las zapatillas nike, el look MTV, el videoclip. Son patrimonios de fácil acceso para una juventud internacionalizada. Con respecto al género la autora es más minuciosa elaborando el siguiente cuadro:

(Campos)

Discurso

Espacio

Interacción


Representaciones diferenciales

Ellos/Ellas

Uso y percepción diferencial del espacio

Ellas/Ellos

Prácticas y participación diferenciales

Ellas/Ellos

Política




Consumo




Religión




Sexualidad




La identidad juvenil, se operacionaliza con el aporte de minuciosos relatos etnográficos donde se desmontan los pactos secretos jugados por los actores y los dispositivos orquestados a nivel intragrupales. En la trama fina de las interacciones juveniles, podemos acceder a un glosario de extraviados donde encontramos las maneras de nombrar al mundo que utilizan los referentes empíricos convocados por Reguillo. Este ejercicio de relevamiento minucioso en el campo, se hace sin perder de vista un horizonte macrosocial. Sus casos seleccionados incluyen una variada gama de identidades juveniles, revisando las prácticas sociales de: anarko punks, raves, chavos banda, skinheads, entre otros. En esta variada gama de identidades y estilos juveniles a la carta, se presta especial atención a los objetos, las marcas, los lenguajes corporales, los sociolectos, la relación con el espacio y el tiempo. (Pág. 98).

El procedimiento empleado por la autora nos muestra un recorrido desde diversas categorías teóricas hacia los fenómenos sociales empíricos. Las teorías formales utilizadas, están dotadas de elevados niveles de abstracción: culturas juveniles, identidades, prácticas juveniles, planteadas en un nivel de teoría formal. Los conceptos que constituyen el armazón del marco teórico, se operacionalizan apelando a sucesivas aproximaciones que conducen hacia el referente empírico de su investigación.

En esos acercamientos se accede al entramado complejo de las interacciones establecidas por los sujetos en situación de enfrentamiento y atravesadas por un contexto particular de realización. Su abordaje metodológico declara la combinación de dos niveles: uno de escala microsocial anclado en lo situacional, donde se detallan aspectos subjetivos íntimos de los sujetos juveniles desplegando en las situaciones de interacción cara a cara y se complementa con otro de escala macrosocial, donde se trasciende la dimensión particular para explicar las relaciones de fuerzas objetivas que operan en esas interacciones sociales. (Páginas 92, 93).

El análisis empírico de las identidades lo ubica en los objetos, las marcas y los lenguajes corporales, los sociolectos, la relación con el espacio y el tiempo. La autora entiende que son componentes fundamentales para entender las identidades sociales que buscan "hacerse reconocer". Este proceso social lo denomina "dramatización de la identidad". (Pág. 98).

g. El uso de comparaciones como estrategia de investigación

En este libro se presenta la figura de los jóvenes intentando resolver sus dramas existenciales, ante los retos que le generan los avances de la modernidad mundo. En las selecciones de muestras de jóvenes originarios de diversas partes del mundo, se buscan elementos compartidos por estos sujetos más allá de sus nacionalidades. En este sentido, el texto reporta las designaciones que reciben en algunos países de Latinoamérica. Así, se hace referencia a diversos movimientos juveniles por el mundo: los chavos banda, cholos y punk de México, los maras en Guatemala, los sicarios de Colombia, los favelados de Brasil, entre otros representantes plantetarios. El proceso de agrupación de los jóvenes se extiende a la aparición de los okupas en España, skinheads de Inglaterra y Alemania. (Pág. 21).

Este tratamiento de los datos recolectados sobre los sujetos juveniles en distintas partes del planeta presenta la riqueza de una heterogeneidad, se somete a procesos de comparación entre las especificidades culturales trazando ciertas uniformidades que unen a los sujetos en un mismo universo simbólico. La cultura juvenil y algunos de sus elementos constitutivos: los miedos, las formas de participación política y ciudadana, son materiales que atraviesan varios casos. Es por ello que podemos reconocer en esta investigación el uso de casos múltiples con sus matices singulares que sin embargo, son aglutinados por un mismo tema. Los casos seleccionados por la autora tienen un tratamiento instrumental, porque su foco apunta a los actores y el sentido social que ellos les atribuyen a sus prácticas.

En este texto puede detectarse la búsqueda de similitudes, el ejercicio intelectual de establecer conexiones teóricas y la formulación de explicaciones que argumentan las razones que ubican a los jóvenes en procesos compartidos. La autora se remite a las mismas encrucijadas existenciales, las búsquedas de los jóvenes son idénticas: certidumbres, trabajo, acción. (Pág. 152).

Existe una estética globalizada, toma ejemplos como el caso de MTV que introduce patrones de movimientos corporales compartidos por los receptores de esos programas de televisión, este proceso nos muestra la juventud sumergida en los procesos de mundialización de las culturas.

Rosanna Reguillo luego de desmontar las prácticas sociales de los sujetos juveniles en su especificidad y lógicas propias de desenvolvimiento, establece el trazado de un conjunto de elementos compartidos por sus referentes empíricos de investigación. La muestra que ella toma incluye al movimiento "punk", los grupos juveniles "taggers", los sujetos agrupados como "los raztecas" y "los raves". Luego de desmenuzar las formas particulares de construir las identidades, la autora establece el atravesamiento de la misma afección que rebasa sus singularidades. En el marco de una crisis de la modernidad, los jóvenes experimentan procesos de afectación en la percepción de la política, del espacio y del futuro.

En ese marco despliegan estrategias de vida que tienen denominadores comunes. Enumera: 1. la conciencia planetaria internacionalizada, 2. priorizan los pequeños espacios de la vida cotidiana, 3. demuestran un respeto casi religioso por el individuo que se convierte en el centro de las prácticas, 4. hay una selección de las causas sociales en las que se involucran, 5. El barrio ha dejado de ser el epicentro del mundo. (Pág. 142).

En la investigación la metodología desarrolla una comparación por el método de la concordancia, esto significa presentar diversas unidades de análisis (los casos de culturas juveniles de distintos países del mundo) y trazan los denominadores comunes. La selección de casos, utiliza los siguientes pasos: 1. selección del universo, definición y marco conceptual, 2. Construcción de variables, 3. Selección de casos.

h. El uso de triangulaciones en la estrategia de investigación

La investigación posee hipótesis, preguntas y objetivos de investigación, construidos a escala mundial y este alcance obliga a la autora a aplicar diversas triangulaciones. En el documento se visualiza la utilización de diversos tipos de triangulaciones:

Las triangulaciones de datos sobre el tópico particular en la exposición de una importante recopilación de información del tema, cuyo alcance es de escala mundial. Este ejercicio pone en evidencia un importante rastrillaje en el armado del estado de la cuestión.

Las triangulaciones teóricas, son expuestas por la autora, cuando hace enfrentar las perspectivas teóricas de los estudios existentes sobre las culturas juveniles, aprovechando la convergencia de diversos enfoques epistémicos para mostrar sus alcances y limitaciones. Con base a esta recopilación sobre los estudios de jóvenes, la autora traza una clasificación de dos enfoques: el enfoque descriptivo instalado en un punto de vista interior, es decir desde el nativo y el enfoque interpretativo desde un observador externo que no dialoga con el nativo. Estas dos alternativas de abordaje son presentadas como opuestas e irreconciliables. (Pág. 33).

Luego de criticar las flaquezas de estos abordajes propone un acercamiento a la perspectiva interpretativa hermenéutica que concilie la oposición interior exterior. En esta propuesta de resolución, se busca problematizar las/los jóvenes en su complejidad, analizando las configuraciones de representaciones sociales, la atribución de sentidos a las prácticas. Esta tarea implica considerar al joven dejando de lado descripciones universales, edades biológicas, etapas de desarrollo evolutivo, que no son generalizables a todas las culturas juveniles. En vez de ello es conveniente, entenderlo como sujeto del discurso, actor que pronuncia su palabra y la cultura con capacidad de operar transformaciones en su entorno.

Las triangulaciones metodológicas pueden identificarse bajo la forma de intermétodos. Este uso multivariado de métodos puede apreciarse cuando declara el uso de técnicas de recolección de datos funcionando en forma complementaria para obtener múltiples dimensiones de su objeto de estudio y especificando las intenciones biográficas de los grupos de discusión apuntados hacia la captación de las representaciones sociales de los sujetos juveniles; las expectativas de búsqueda planificados en los registros de observación etnográficos, centrado en las lógicas peculiares de las prácticas sociales.

La triangulación de autores se desarrolla convocando a especialistas en la temática de las culturas juveniles, recolectando estudios de varios países de América latina y el mundo. Cita las experiencias juveniles de México, Colombia, Venezuela. A la vez que establece un dialogo multidisciplinario con aportes de Néstor García Canclini, Pierre Bourdieu, Jesús Martín Barbero, Margaret Mead, Hobsbawm por nombrar solo algunos, donde convergen matices de la Comunicación, la Sociología, la Antropología y la Historia que en su conjunto iluminan desde diversos ópticas de apreciación, al objeto de estudio en cuestión. (Pág. 38).

i. Apreciación de carácter general sobre los aspectos metodológicos de la investigación seleccionada

Esta investigación se inscribe dentro de los estudios culturales utilizando una metodología de corte cualitativo para entender a las identidades juveniles emergentes. El enfoque es etnográfico en tanto remite a dimensiones de la vida cotidiana, las interacciones sociales, las situaciones de enfrentamiento cara a cara de los actores juveniles reportando sus maneras de nombrar al mundo, con sus respectivas categorías sociales. Con esta perspectiva de abordaje aporta la riqueza de la descripción densa cargada de detalles finos recogidos en la parcela de realidad estudiada, logra desmontar los dispositivos de relación, conoce la trama fina de las actuaciones en territorios juveniles y así obtiene una escala intragrupal regional de sus referentes. (Pág. 95).

En el libro queda explicitado que el tema de los jóvenes y el lugar de análisis metodológico escogido por la autora es la vida cotidiana. En ese sitio estratégico para interrogar la realidad, la autora dirige la mirada a los modos de ocupar los territorios, a través de los siguientes ejes: a. la constitución de los grupos juveniles, b. la ubicación de los otros o las alteridades, c. las prácticas y los proyectos juveniles.

Esta dimensión descriptiva particular, se articula con una dimensión contextual relacional de los sujetos juveniles. Esta situación resuelve el problema de las etnografías como conocimientos locales sin integración con procesos de mundialización de la cultura. La conexión de dimensiones locales y globales particulares y generales permiten hacer un despliegue de comparaciones, recolectar información de diversas muestras de jóvenes de todo el planeta, combinar técnicas de recolección de datos y análisis de los mismos, arribar a hipótesis y teorías provisorias de alcance mundial. El trabajo combina herramientas de diversas disciplinas sociales. Se declara un trabajo de historización de las prácticas juveniles, trazando etapas históricas e identificando desplazamientos en las maneras de abordar las culturas juveniles según periodos históricos. Echa mano a elementos del análisis del discurso.

En definitiva su metodología se hace más completa por las múltiples triangulaciones que iluminan desde diversos puntos un objeto de estudio y se hace más compleja por la multiplicidad de planos teóricos y metodológicos que estructuran el trabajo.

Bibliografía

GALLART, M. (1993) "La integración de métodos y la metodología cualitativa", en Métodos Cualitativos II. La práctica de la investigación, ed. Centro Editor de América Latina, Bs. As.

GLASER, B. y STRAUSS, A. (1967) The discovery of Grounded Theory. Strategies for Qualitative Research, ed. Aldine, Chicago.

REGUILLO, R. (2000) Emergencia de culturas juveniles. Estrategias del desencanto, ed. Norma, Bs. As.

STAKE, R. (1994) Investigación con estudios de casos, Morata, Madrid.

Esta obra está bajo licencia
Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 2.5 Argentina